Sopa castellana

La sopa castellana, o sopas de ajo, es una receta tradicional castellana sumamente humilde pero que bien hecha resulta sumamente sabrosa.

El secreto para que salga bien está en el pan usado. Debe ser de hogaza cortado en el tamaño y grosor justos y estar lo suficientemente duro. También es importante respetar las cantidades justas de los ingredientes y usar tacos de jamón recortados de la parte cercana al hueso.

Ingredientes:

  • 75 g de pan de hogaza

  • Un chorro generoso de aceite de oliva

  • 4 dientes de ajo de buen tamaño

  • 65 g de tacos de jamón (extraídos del hueso)

  • 2 cucharillas de pimentón (dulce o mezclado, al gusto)

  • 300 ml de caldo de carne

  • 700 ml de agua

  • 2 huevos

  • Sal al gusto

Comenzamos cortando los ajos en láminas finas y sofriéndoles a fuego medio en un generoso chorro de aceite de oliva. Cuando comiencen a hacerse se añaden los tacos de jamón y se remueve todo con una cuchara de palo. Es fundamental que los ajos no se quemen, porque si no la sopa saldrá amarga.

Se sofrían los ajos y el jamón hasta que los primeros empiecen a dorarse; entonces se añade el pan a la sartén. El objetivo es que el aceite con las esencias del ajo y el jamón se empape bien en el pan.

Se añade entonces al pimentón, cuidando de que no se queme, y cuando esté hecho, se añade el agua y el caldo de carne mezclados. Se remueve ligeramente para homogenizar la mezcla y se deja cocer a fuego medio durante 10 minutos.

Finalmente, se añades los huevos (se pueden dejar enteros o «romperlos», según gustos) y se mantiene la cocción hasta que se hagan (otros 10 minutos aproximadamente).

Es posible guardar para el día siguiente y calentar en el microondas.

sopa castellana

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